domingo, 28 de abril de 2013

Escuchar es todo un Arte


Que gran dicha es poder tener el sentido del oído, poder escuchar lo que pasa a nuestro alrededor, escuchar    la naturaleza, como el mar, el aire, la lluvia, escuchar las voces de las personas que nos rodean, nuestros seres queridos, nuestros compañeros de trabajo, a nosotros mismos... atendiendo nuestras necesidades,  todo esto suena bien, no creen? pero realmente escuchar es todo  un arte, ya que la mayoría de las relaciones se rompen por no darnos el tiempo de escuchar lo que el otro necesita, incluso nuestro propio diálogo interno en muchas ocasiones es todo un bombardeo de pensamientos que lo único que provoca es confusión y un fuerte dolor de cabeza y una desconexión con el otro.

En una de las clases que he tomado, me compartieron este escrito, cuyo autor es José Carlos Bermejo, del libro "Humanizar la Salud", el cual cobra mucho sentido en cualquier tipo de relación y ahora quiero compartirlo contigo:


¡Escúchame!
Cuando te pido que me escuches
y tú empiezas a darme consejos,
no has hecho lo que te he pedido.
Cuando te pido que me escuches
y tú empiezas a decirme  por qué no tendría que sentirme así,
no respetas mis sentimientos.
Cuando te pido que me escuches
y tú sientes el deber de hacer algo para resolver mi problema,
no respondes a mis necesidades.
¡Escúchame!
Todo lo que te pido es que me escuches,
no que hables o que hagas.
Aconsejar es fácil, pero yo no soy un incapaz.
Quizás esté desanimado o en dificultad, pero no soy un inútil.
Cuando tú haces por mí lo que yo mismo podría hacer y no necesito,
no haces más que contribuir a mi inseguridad,.
Pero cuando aceptas simplemente,
que lo que siento me pertenece, aunque sea irracional,
entonces no tengo que intentar hacértelo entender, sino empezar a descubrir lo que hay dentro de mí.

Todo un arte, y para lograr esa maestría hay que practicar una y otra vez... hasta que se forme un hábito... vale la pena intentarlo, no les parece?

Hasta la próxima!!